El grafiti de Bambino y otras maneras de recordar a las leyendas de la música española

Camarón de la Isla, Raphael, Sara Montiel o Nino Bravo tienen museos en sus localidades de nacimiento.

Existen privilegios que se reservan para los más grandes. Un privilegio para aquellos artistas que han dejado huella en la historia de la música y que, no importa cuántos años pasen, siguen formando parte de la banda sonora de nuestro día a día. Como tener un museo dedicado. Elvis Presley tiene en Memphis Graceland, la mansión en la que vivió hasta su muerte, y también es visitable el piso en el que Jimi Hendrix vivió en Londres a finales de los años 60, en el 23 de Brook Street. Hay quien piensa a lo grande: Dolly Parton creó con Dollywood su propio parque temático al más puro estilo Disneylandia. ABBA (en Estocolmo), The Beatles (en Liverpool) o Tina Turner (en Nutbush, Tennessee) son otros artistas con museo.

España tampoco olvida a sus campeones musicales. En julio se celebraba el 29º aniversario de la muerte de Camarón de La Isla con la inauguración en San Fernando de un centro de interpretación dedicado al legado del artista y, este mismo lunes, Utrera presentaba un gran grafiti en homenaje a Bambino que, además, servirá como cartel para el documental sobre el cantante que se estrenará próximamente.

El rostro de Miguel Vargas Jiménez, más conocido como Bambino, ocupa un muro de la barriada de El Tinte, entorno natal del flamígero artista, fallecido en 1999. El mural es obra de Man-o-matic y funciona también como anticipo de ‘Algo Salvaje. La Historia de Bambino’, documental dirigido por Paco Ortiz, quien reincide en temas flamencos tras obras como ’13. Miguel Poveda’ (2015), ‘Acariciando el aire. Matilde Coral’ (2016) o ‘Se prohíbe el cante’ (2019). El filme mezcla secuencias que recrean la vida del vocalista, interpretado por Luis Alberto Domínguez en su madurez y por Miguel Clavijo -hijo de una sobrina de Bambino- en sus primero años, con entrevistas a familiares y artistas que le admiran, como José Mercé, Antonio Carmona o Los del Río.

Bambino tiene un santuario dedicado a su memoria en el bar Leo, en la Barceloneta, en Barcelona.

Génesis difícil

La Ruta de Camarón, que recorre San Fernando, el municipio natal del artista, pasa por su vivienda, su primer escenario o el mausoleo en el que descansa, y se ha convertido «casi en un punto de peregrinación», señalan desde el ayuntamiento de la localidad gaditana. Allí abrió este verano el Centro de Interpretación de Camarón de la Isla, que se ha convertido en el colofón del itinerario y que expone más de 400 objetos personales del cantaor, incluido el Mercedes 300D con el que recorría España de concierto en concierto.

No ha sido fácil la inauguración del espacio camaroniano, varias veces aplazada. «La familia sigue pensando que merece más dinero», informan fuentes municipales. «Aún quedan algunos flecos por pulir, como el ‘merchandising’ o el precio de la entrada, pero es simple pelusilla. En ese sentido hemos tenido suerte porque la familia siempre ha estado por la labor de llevar el proyecto adelante«.

Normalmente, estos museos se construyen como una forma de recordar el legado de un artista una vez que este ha fallecido. En la llanura quijotesca de Campo de Criptana, en Ciudad Real, encontramos un tradicional molino de tres plantas dedicado a Sara Montiel (con busto de cerámica incluido, cual diosa griega) y el diminuto pueblo de Aielo de Malferit (Valencia) brinda un emotivo viaje por la vida de Nino Bravo, fallecido en un fatal accidente de tráfico en 1973.

En vida

Pero Raphael es especial. Las puertas del Museo de Raphael, en Linares, su pueblo natal, se abrieron hace diez años, con el artista en activo y con una retirada que, a los 78 años, todavía se ve lejana. Algo insólito. Como el Disco de Uranio que recibió por sus ventas, galardón que se encuentra en las vitrinas del museo y que solo poseen 5 artistas en todo el mundo (el jienense, Michael Jackson, Queen, AC/DC y U2).

Otros, como Joaquín Sabina, también han logrado un pequeño altar a su obra en vida. En su caso, una modesta taberna situada en Úbeda, ciudad de origen del cantante.

Tarea casi imposible

El museo dedicado a Rocío Jurado en su Chipiona natal es un proyecto que data de 2010. Pero problemas de financiación y burocráticos y una pandemia mundial han alargado el proceso de apertura del espacio, que ya está completamente equipado hace años. Según parece, desencuentros entre Rocío Carrasco y el ayuntamiento también han contribuido a retrasar la inauguración.

El museo de Rocío Dúrcal (en Dúrcal, Granada) lleva en el borrador desde 2007, mientras que los de Camilo Sesto (Alcoi) y Paco de Lucía (Algeciras) abrirán pronto.

Artículo original en Levante.

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